viernes, 19 de octubre de 2012

Cosas imprescindibles: Tartas de fondant

a las viernes, octubre 19, 2012
¡Buenos días de viernes!

Tengo unos wrappers nuevos que tengo muchas ganas de enseñaros, pero como sin cupcakes dentro no lucen tanto y tengo que aprovisionarme de mantequilla, los dejaré para el finde.

Así que hoy os voy a hablar un poquito sobre las tartas de fondant. Después de la "masterclass" sobre fondant del otro día (si no lo habéis visto, podéis hacerlo aquí) os voy a hablar de cómo podemos empezar a hacer nuestras primeras tartas de fondant.



Empezar con ello es un poco dificilillo, así que si las primeras veces no os sale tan bien como esperabais, ¡¡no os desaniméis!! Nos pasa absolutamente a todas (teníais que ver mis primeros intentos).





Bien, al lío. Lo primero: el bizcocho de dentro de la tarta.

No sirve cualquier bizcocho, y más dependiendo de la tarta que vayamos a hacer (si tiene más de un piso, si tiene muchas decoraciones pesadas...). Hay que utilizar un bizcocho durito, que no se hunda si le ponemos peso encima, y que tampoco sea demasiado seco al comerlo. Más adelante os pondré las recetas que más me han gustado en todo el tiempo que llevo haciendo tartas.

Suelen utilizarse los llamados "Madeira Sponge Cake" o "Victoria Sponge Cake". Aún así, no hay ninguna receta específica así que si tenéis una receta que es la que soléis utilizar y creéis que tiene la consistencia adecuada, ¡adelante!



Me gustan mucho las recetas de Sugarmur y las de Alma, si queréis echar un vistazo podéis mirar aquí y aquí.

El fondant tiende a absorber la humedad del bizcocho, por lo que en este tipo de tartas hay un par de reglas básicas:
  • Hay que utilizar una buena capa de crema (aquí hay otra vez infinidad de recetas, podemos utilizar por ejemplo la misma buttercream que utilizamos para decorar los cupcakes) entre cada capa del bizcocho, y también una capa exterior entre el bizcocho y el fondant.
  • Hay que hidratar el bizcocho para evitar que con el paso del tiempo quede demasiado seco. Para ello utilizamos almíbar (también de esto os daré una receta muy sencilla). Seguro que vuestras madres también lo hacían, bañando el bizcocho en algún tipo de licor.


El bizcocho lo cortaremos en capas normalmente, para poder hidratarlo mejor y ponerle suficiente crema.

Pero no os penséis que esta parte es aburrida y monótona... se pueden hacer cosas preciosísimas que quedarán a la vista cuando cortemos la tarta... os aseguro que es igual de bien recibido que la decoración exterior. Fijaos:


¡Chulo, eh!


Una vez que tengamos el bizcocho preparado, podemos pasar a forrarlo con fondant. Ésta es la peor parte de todas, porque es difícil que quede perfecto. La técnica es la siguiente:
  • Estiramos el fondant con un rodillo, procurando que quede uniforme. Te aconsejan que las primeras veces lo dejes un poco gordito (unos 4-5 milímetros) para que sea más difícil que  se rompa al colocarlo.
  • Lo enrollamos en el propio rodillo para trasladarlo a la tarta.
  • Lo vamos poniendo encima del bizcocho, desenrollándolo con cuidado del rodillo.
  • Ahora, lo difícil. Tenemos que conseguir que esté todo lisito y sin arrugas. Cortamos los bordes sobrantes con un cuchillo o un cortador de pizza y con los dedos, vamos estirando poco a poco y alisándolo.

Si lo que queremos es una tarta de dos pisos (o más, para las valientes), es cuestión de repetir el proceso con un segundo (o tercer) bizcocho y colocarlo encima. Para que no se nos hunda con el tiempo, tenemos que poner unos pilares en el bizcocho de abajo.
Yo utilizo unas pajitas (de las de beber, de toda la vida) que corto a la altura del bizcocho y pongo dentro unos palitos de madera (de los que venden para hacer brochetas).

Una imagen muy interesante e ilustrativa que encontré el otro día sobre cómo colocar los pilares:



Lo sé, ahora mismo parece súper complicado. Cuando nos pongamos al tema, lo veréis más claro.

Una vez que esta parte está terminada, ¡ahora sólo hay que decorar! Aquí es donde entra la imaginación de cada uno. Podemos hacer flores, letras, formas, ponerle lazos, purpurinas, muñequitos... Todo lo que se os ocurra y más.

Un truquito: si os fijáis, todas o casi todas las tartas colocan algún tipo de adorno en la parte baja. Y, ¿Por qué? Para ocultar las posibles imperfecciones. Así que no os penséis que sois las únicas a las que no os queda perfecto... ¡aquí hay trucos por todos lados!

Podemos usar lazos como en estas tartas de Alma y Bella Cupcakes:



O fundirlo con la decoración como en éstas de Bella Cupcakes y Sugarmur:


Esta tarta me encanta: una tarta para un bebé de Megasilvita. Si os fijais, utiliza una tira de fondant a modo de lazo y bolitas perladas a modo de burbujas en la parte de abajo.



Y como seguro que os gusta ver maravillas como estas, os dejo algunas de mis tartas favoritas de la blogosfera (perdonad, pero algunas no sé de dónde las he cogido...):




Y después de ponernos los dientes largos, siguiente paso: herramientas que necesitaremos para hacer nuestras tartas de fondant.

Fondant

(obviamente). Dicen que los hay mejores y peores para forrar o modelar. Yo no he utilizado muchos, pero podéis echar un vistazo a lo que os conté sobre el tema aquí.


Rodillo para fondant

Yo al final me compré un rodillo especial para estas cosas. Tenía por casa el de madera de toda la vida, pero al tener marcas las iba imprimiendo sobre el fondant y el resultado no era del todo bueno. Suelen ser carillos, pero es algo que si vais a seguir trabajando con fondant necesitaréis.
Éste es de Wilton, mide 22,5 cm y viene con cuatro anillas de goma que nos sirve para ayudarnos a mantener el grosor del fondant cuando lo alisamos. A la hora de alisar el fondant para forrar una tarta se nos quedará algo pequeño, pero para el resto de decoraciones y cosas más pequeñas os lo recomiendo muy mucho.
Podéis encontrar este modelo en las tiendas que os listé aquí, por ejemplo en Decake aquí o María Lunarillos aquí. Y más grandes, por ejemplo éste de 40 cm o éste de 50 cm.

Pilares para el bizcocho

en caso de que queramos hacer una tarta de dos pisos (o más). Los venden especiales para ello o podéis fabricarlos con pajitas y palitos de madera.
 

Alisador para tartas de fondant

No es indispensable, pero muy recomendable. Nos ayudará a conseguir un resultado perfecto.


Podéis encontrarlo aquí, o aquí.

Base para tarta

Podemos fabricarlo con cartón y papel albal, pero las que venden son baratitas y taaaan monas... que os recomiendo comprarlas.
Tienen éste aspecto:


Tenéis algunas aquí y aquí.

Podría decir un montón de cosas y herramientas más: listones niveladores para alisar el fondant, platos giratorios para decorar y extender la crema, estecas, cortadores, rodillos texturizadores, cajas para transportar las tartas... Este universo es adictivo (si aún no os habéis dado cuenta no tardaréis mucho en hacerlo), y se corre el riesgo de dejarse el sueldo (o la paga) en la infinidad de cosas que hay.

Con éstos que os he enseñado, y si no me he olvidado de ninguno que también puede ser, estaríamos preparados para empezar con las tartitas fondant. En cuanto tenga la menor oportunidad de encasquetarle a alguien una tarta, os pongo un paso a paso detalladito para que veáis todo mejor.


Os dejo el documento para descargaros con la info de esta entrada aquí.

7 comentarios:

Ainhoa dijo...

Esto ya me da mucho respeto. Las que he visto están geniales pero... ¡ufff! ¡Qué chungo!
Por cierto, ¿qué tamaño de plato recomiendas comprar?

My world for a cupcake dijo...

Hombre las primeras te van a salir chunguillas seguro... pero todo es ponerse!
Lo de la base es fácil, mira qué molde vas a usar y cómpralo un poco más grande (a partir de 5 cm más, por ejemplo)

Ainhoa dijo...

El lunes intentaré hacer una, a ver que sale... ¡Miedito me da! :oS

Anónimo dijo...

QUE ES MEJOR, COMPRAR EL FONDANT O PREPARARLO EN CASA

My world for a cupcake dijo...

¡Hola!

Pues yo, las primeras veces, lo hacía en casa. La verdad es que se tarda bastante (tienes que amasar un buen rato), cuesta un poco amasar todo ese azúcar glass y es muuuy engorroso. Las nubes se te pegan a las manos, al cuenco...

Yo te recomiendo sin duda comprarlo. Todos los que se dedican a la pastelería lo compran hecho, porque hacerlo de forma manual lleva bastante tiempo y es muy tedioso.

¡Un saludo!

Anónimo dijo...

Yo apenas estoy por hacer el primero haber como me va

My world for a cupcake dijo...

¡Mucha suerte! Y si te va mal (como a todos los que empezamos) sigue intentándolo!

Publicar un comentario

 

My world for a cupcake Template by Ipietoon Blogger Template | 2012